Las prioridades de conservación que se han identificado para este espacio son:
1.- Ecosistema fluvial.
Los ríos y riberas son los ecosistemas que cohesionan el territorio constituyendo una unidad funcional. Esta ZEC cumple una función como corredor ecológico, conectando varios espacios protegidos del norte de la provincia de Córdoba, algunos de los cuales representan los principales ejes para la conectividad ecológica en Andalucía.
El ecosistema fluvial cumple una función esencial como corredor ecológico. Conforme al artículo 46 Coherencia y conectividad de la red Natura 2000 de la Ley 42/2007, de 13 de diciembre, se insta a las comunidades autónomas a fomentar la conservación de corredores ecológicos y la gestión de aquellos elementos del paisaje y áreas territoriales que resulten esenciales o revistan primordial importancia para la migración, distribución geográfica e intercambio genético entre poblaciones de especies de fauna y flora silvestres, con el fin de mejorar la coherencia ecológica y la conectividad de la red Natura 2000.
La masa de agua, como parte fundamental en el ecosistema fluvial, es esencial para mantener la biodiversidad, ya que permite el desarrollo de una gran variedad de especies animales y vegetales que, de forma exclusiva o muy ligadas a ella, necesitan el medio acuático para completar su ciclo biológico o como fuente de alimentación.
En esta ZEC existe una elevada diversidad faunística, destacando la presencia de algunas especies de peces como la boga del Guadiana (Chondrostoma willkommi / Ch. polylepis), la colmilleja (Cobitis paludica), la pardilla (Rutilus lemmingii) y el pez fraile (Salaria fluviatilis). Además de la ictiofauna, se encuentran especies de anfibios y reptiles propios de este medio, algunos de interés comunitario, contribuyendo todos ellos al aumento de la biodiversidad. Este ecosistema también propicia la presencia de especies relevantes de flora como Marsilea batardae (trébol de cuatro hojas) y Nymphaea alba (nenúfar blanco).
En el ámbito de la ZEC se han identificado los siguientes hábitats de interés comunitario ligados al ecosistema fluvial: 3150, 3170*, 6420, 91B0 y 92D0. El mantenimiento de los hábitats de ribera en un grado favorable de conservación es beneficioso porque estos regulan el microclima del río, aseguran la estabilidad de las orillas, actúan como filtro frente a la entrada de sedimentos y sustancias químicas en el cauce, cumplen un papel de acumuladores de agua y sedimentos, amortiguan las inundaciones y sirven de recarga de aguas subterráneas.
2.- La nutria (Lutra lutra).
Esta especie es destacada en el momento de la designación del río Zújar como LIC. La nutria está incluida en los anexos II y V de la Ley 42/2007, de 13 de diciembre; y se encuentra en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial.
Se trata de un animal muy sensible a determinadas variaciones en el medio, especialmente las relacionadas con las modificaciones introducidas por el hombre: contaminación, destrucción de riberas y disminución de las poblaciones de peces y cangrejos. Dicha sensibilidad le hace responder muy rápidamente a estas variaciones. Por ello se le considera como bioindicador de estos ecosistemas, siendo la especie de referencia en campañas para la conservación y sensibilización frente a las alteraciones de las cuencas hidrográficas.
La nutria, al ser un omnívoro, se localiza en la cúspide de la pirámide trófica. Es una especie solitaria y territorial, que posee unos elevados requerimientos espaciales, de decenas de kilómetros, lo que contribuye a que sus poblaciones sean dispersas y escasas.
En el ámbito de la ZEC, considerando la calidad de las riberas como aceptable y que la dinámica poblacional de la nutria indica que puede seguir constituyendo a largo plazo un elemento vital de las ZEC, se concluye que la nutria presenta un grado de conservación favorable.
3.- Peces del Anexo II de la Directiva Hábitats y del Plan de conservación y recuperación de peces e invertebrados de medios acuáticos epicontinentales.
En el ámbito del Plan se ha identificado la presencia de las siguientes especies de peces del Anexo II de la Directiva Hábitats: Chondrostoma willkommii, Cobitis paludica, Anaecypris hispánica, Barbus comizo, Iberocypris alburnoides e Iberochondrostoma lemmingii.
a.- Chondrostoma willkommii está presente en la ZEC Río Zújar, principalmente, en los tramos medios de los ríos con marcada corriente. Está ampliamente extendida por los ríos de la provincia de Córdoba, principalmente al norte del Guadalquivir. Fue motivo por el que se declaró este espacio como LIC.
b.- La presencia de Anaecypris hispanica fue también motivo por el que se designó como LIC el Río Zújar. Está especie está recogida en los Catálogos Nacional y Andaluz de Especies Amenazadas bajo la categoría en peligro de extinción, y es objeto del Plan de recuperación y conservación de peces e invertebrados de medios acuáticos epicontinentales. Se trata de una especie endémica de la península ibérica, y ha sido calificada como el pez primario más amenazado de Europa.
c.- Presencia de Iberocypris alburnoides, también fue motivo de que este espacio se designara como LIC. Es una especie endémica de la península ibérica, que se distribuye por las cuencas de los ríos Duero, Tajo, Guadiana, Odiel y Guadalquivir, que está considerada como localmente abundante.
d.- Iberochondrostoma lemmingii es un endemismo de la península ibérica. Se ha constatado su presencia esta ZEC.
e.- Barbus comizo, endemismo ibérico. Solo está citado en las cuencas de los ríos Tajo, Guadiana y Guadalquivir. Su presencia ha sido constatada en este espacio.
f.- Se considera también prioridad de conservación la especie Salaria fluviatilis (pez fraile), que aunque no se encuentra recogida en los anexos de la Directiva Hábitats, está catalogada en los Catálagos Andaluz y Nacional de Especies Amenazadas con la categoría de vulnerable. Esta especie se incluye en el ámbito de aplicación del Plan de recuperación y conservación de peces e invertebrados de medios acuáticos epicontinentales, donde se menciona que: “La situación del fraile en Andalucía es bastante incierta y existe poca información al respecto, aunque se ha estimado que su población se ha reducido prácticamente a la mitad en muy poco tiempo, y en muchas de las zonas que ocupaba ha desaparecido”.
4.- Flora amenazada.
Presencia de la especie Marsilea batardae, incluida en los anexos II y IV de la Directiva Hábitats y en el Listado Nacional de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial. También se encuentra catalogada en peligro de extinción en el Catálogo Andaluz de Especies Amenazadas. Esta especie se enmarca en el ámbito de actuación del Plan de Recuperación y Conservación de Helechos.
Otra especie presente en este espacio es la Nymphaea alba. Se localiza en zonas remansadas, con aguas quietas y de una cierta profundidad. |